“Un colección de aforismos sirve para calentar motores en una interesante experiencia poética en el bar Trastero”, comentó en la madrugada de anoche en twitter Francisco Pérez, periodista y uno de los asistentes a la perfomance poética que desarrolló ayer el versátil artista y filólogo granadino Tirso Priscilo Vallecillos. Todo comenzó con la proyección de un corto de producción de Tirso con el que nos conmovió a todos los presentes. Arte emocional a flor de piel, imágenes de gran calidad poética, daban paso a escenas cotidianas y ,éstas, a otras provocadoras en una rueda interminable de sensaciones dispares, sensaciones contradictorias en subida sideral o bajada en picado, como si estuviéramos sintiendo la inercia irrefrenable de una montaña rusa, todo bajo la voz serena del artista leyendo sus poemas en off. Luego vinieron los aforismos (Seré Bre, ed. Cicus 2015) , leídos por Mar Toscano y Bárbara Grande, que nos levantaron el humor aún con lágrimas en las pestañas. Los 4 grados del exterior ya no importaban, el bar Trastero se había convertido en un espacio compartido de calor. Los aplausos abrazaron el eco de las paredes. Más tarde, Tirso Priscilo abrió el Libro de Cocina Tradicional Caníbal (Ediciones en Huida, 2016) y nos deleito con un par de recetas de extraordinaria ejecución.
Tras un breve descanso para renovar lo consumido, Tirso convirtió la sala en un vagón de metro, se ayudó para ello de la proyección de un segundo vídeo y el reparto de billetes, alguien encontró más billetes en una cartera perdida y los repartió también entre el público y algunos, agarrados a la barra para no perder el equilibrio nos vimos obligados a subir al escenario. Mientras tanto los numerosos asistentes leían las frases de los billetes repartidos, frases inconclusas que Tirso Priscilo o Uberto Stabile completaba. De repente todos, artista invitado y público en general nos vimos interactuando dentro de la obra representada, cómo si la estuviéramos viviendo realmente, como si todos fuéramos en un vagón de metro que partía de la tertulia cultural Trastero Dispar-Arte hacía algún lugar inconcreto y misterioso. Fue una noche mágica, muy bien ambientada musicalmente por la guitarra de Bárbara Grande y la voz de tantos como allí estuvimos. Gracias a Tirso por venir desde Sevilla ayer para hacernos el regalazo que nos hizo. Arte en estado puro. Un espectáculo de varias artes integradas en una perfomance maravillosa y sorprendente. Un artista del que, sin duda, oiremos hablar con mayor asiduidad.
Francisco Vaz Gallego
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